Alrededor de 200 profesionales de las 32 comunas en la que está presente y que se desempeñan en el PREVIENE del SENDA Regional participaron de la capacitación “Desarrollo neurobiológico y su relación con el consumo de sustancias”, impartida por el Programa de Drogas y Alcohol en Contexto Escolar de la Universidad de Playa Ancha (UPLA).
El relator de esta actividad fue el académico y especialista en Didáctica de las Ciencias por la Universidad Autónoma de Barcelona y magíster en Neurobiología y Ciencias de la Educación, Claudio Berríos, quien se desempeña en el Laboratorio Neurociencias de la Facultad de Ciencias Naturales y Exactas de esta casa de estudios.
Durante su conferencia, el especialista abordó con ejemplos y explicaciones prácticos las temáticas relacionadas con los neurotransmisores y transmisión de la sustancia; circuito de recompensas y zonas involucradas (corteza prefrontal, sistema límbico); poda sináptica y la relación que tienen con el consumo de drogas algunos fármacos clasificados como “tranquilizantes” , por ejemplo clonazepam, amprazolam o ravotril, en niños, niñas, adolescentes y jóvenes de establecimientos educativos.
Claudio Berríos explicó que todas las drogas son dañinas, aunque se trate de las llamadas “drogas de diversión”, pues modifican los mecanismos por sobre los cuales el sistema nervioso central basa su funcionamiento. “Es importante tomar consciencia de que la droga A, la droga B, por ejemplo el tusy, la cocaína rosa, o la cocaína blanca o la cafeína o la marihuana van estableciendo cambios en los mecanismos sinápticos de conexión entre las neuronas, van produciendo modificaciones en la sobrevida del tejido nervioso, entiéndase no solamente en las neuronas, sino en las células gliales”.
Esto es especialmente grave en los adolescentes, confirma el académico, pues su cerebro se está modificando y definiendo sus funciones ejecutivas, dominando lo emotivo y definiendo la toma de decisiones inteligentes y los proyectos de futuro. En este sentido algunos daños a considerar son: “Cocaína por ejemplo afecta el control inhibitorio, alcohol hace caer todo el sistema de control prefrontal, el sujeto queda sin voluntad, al igual que con benzodiacepinas, esta es la razón por la cual, por ejemplo, hoy día, debido al lenguaje extranjero la gente le llama “burundanga” a una mezcla a veces racémica de benzodiacepinas que los sujetos ingieren a veces en forma maliciosa, entonces los sujetos pueden salir a caminar hacer un cambio de dinero, sacar dinero de un cajero bancario y no tener consciencia posterior de lo que han hecho”.
Finalmente, Claudio Berríos enfatizó lo peligroso e irremediable del consumo, pues dañan el desarrollo de físico, neurológico y mental. “Las drogas son tremendamente nefastas, porque las drogas parece que en definitiva están produciendo, si se ocupan tempranamente en este chico o chica, están produciendo una alteración de esta modulación y podrían retardar el desarrollo de la corteza prefrontal y en algunos casos dañar, quizás irreversiblemente, el dominio de la corteza cerebral sobre este sistema límbico que es un estallar de emociones de distinta naturaleza”.
La actividad fue encabezada por Boris Hernández, gestor de prevención de SENDA Región de Valparaíso y la doctora Verónica Pastén, encargada del Programa de Drogas y Alcohol en Contexto Escolar de la UPLA. También participaron docentes y directivos de escuelas y liceos y se desarrolló en el marco del convenio existente entre la UPLA y el SENDA Regional.