“Se trató de un homicidio por encargo”. Esa es la tajante confesión de uno de los hijos del fallecido empresario Pedro Carrión, cuyo cuerpo fue encontrado ayer en el patio de una vivienda en Quintero, y que figuraba como desaparecido desde los primeros días de enero cuando se desplazó a Santiago por una reunión de trabajo.
Matías Carrión aseguró, en entrevista a radio Biobío, que los dos detenidos en el caso fueron quienes “mandaron a hacer el crimen» y que habría más personas implicadas.
“Que se sepa toda la verdad, porque fueron personas que mandaron a hacer el crimen. Aquí vienen personas que son de más atrás, que son beneficiarias por esto”, afirmó por la radioemisora.
“Estamos tristes como cualquier persona que encuentra a su padre enterrado, después de un crimen tan horrendo. Él solamente ayudó a estas personas para que le pagaran así”, agregó.
Este jueves se detuvo a un hombre de nacionalidad chilena, identificado como Pablo Solís, según informó la Fiscalía, que confesó su participación en el asesinato y, sobre todo, la ubicación del paradero del cuerpo de la víctima de 49 años.
Posee antecedentes
Este sujeto, que posee antecedentes penales, tiene una directa relación con el primer detenido del caso llamado José Luis Yáñez, quien mantenía una millonaria deuda con Carrión.
El jefe de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE) de la PDI, Juan Pardo, afirmó que “este sujeto está confeso, habría sido uno de los autores materiales, quien después trasladó el cuerpo hasta la región de Valparaíso, donde procedió a enterrarlo en el patio de un inmueble”.
Según su confesión, tras ser contactado por el primer imputado, ambos se reunieron el 3 de enero en el negocio donde planearon el crimen.
(Foto principal: fuente PDI).
(Foto secundaria: fuente La Cuarta).