Desde la Dirección de Seguridad Pública del Municipio de Quilpué, se está potenciando la realización de “marchas preventivas” cuyo principal objetivo es recorrer los campamentos entregando material informativo en torno a la prevención de incendios forestales y estructurales.
Los Colonos, Calichero, Lo Cuarzo, El Mirador y Los Espinos, son los asentamientos donde ya se realizó una primera marcha preventiva. En Los Espinos, ubicado en cercanías de la Villa Olímpica, el recorrido se inició precisamente llamando la atención a un vecino que quemaba maleza a unos metros de su vivienda y muy cerca de áreas con abundante vegetación seca. Francisco Jorquera, director de Seguridad Pública de la Municipalidad de Quilpué, recordó que existe un decreto supremo que prohíbe el uso del fuego, ya sean fogatas, quemas de basura, maleza, etc.
“La principal indicación de autocuidado es no hacer fuego, por ningún motivo, no hacer ningún tipo de fuego, ya que cualquier pavesa o chispa puede saltar y generar inmediatamente un incendio, sobre todo en estos sectores, fondos de quebradas donde hay bastante vegetación. Está prohibido hacer fuego. Lo otro que se les pide a los vecinos y vecinas, es que puedan despejar las hierbas, el deshierbe o el desmalezamiento de los lugares donde habitan y que se puedan comunicar en este caso con la municipalidad para después hacer el retiro de esos residuos o trabajarlo desde el punto de vista del compostaje, del reciclaje, pero que tampoco lo acumulen en ciertos lugares donde después podrían generar algún tipo de incendio forestal.”
Osvaldo Álvarez, integrante de la directiva de la Villa Los Espinos, indicó que, de acuerdo a su propio catastro, el campamento está conformado por 102 familias y entre todos se han organizado para desmalezar y organizarse en caso de emergencias por lo que valoraron este trabajo conjunto con el Municipio.
“Nosotros como comité o como villa en realidad, hemos creado un plan que como vecinos nos juntamos, tratamos de despejar lo que es basura, pastizales, hay otros vecinos que son un poco más osados, donde ellos mismos queman sus pastizales, sabiendo que en realidad puede ocurrir una catástrofe, pero al momento no ha sucedido. Ahora con la orientación que nos ha prestado el municipio, los cuáles son los pasos a seguir para tener una mejor seguridad en cada terreno, para así evitar lo que son las catástrofes. Yo creo que estamos mejor preparados ya, obviamente tenemos que evitar, pero ahora con ayuda del municipio que van a aportar con bateas y otros elementos para así, tener despejado el terreno y evitar lo mejor posible los incendios y otros tipos de catástrofes.”
Además del recorrido vivienda por vivienda para socializar las medidas de prevención a través de volantes informativos, se realizó una reunión en terreno con dirigentes del sector en la que también se planteó el problema de las vías de evacuación y acceso para vehículos de emergencia. La alcaldesa de Quilpué, Valeria Melipillan, indicó que estas marchas preventivas son parte de un trabajo integral en el que no solo está presente la Dirección de Seguridad Pública; equipos de la Dirección de Desarrollo Comunitario e incluso la directora de Secpla, participaron en la intervención para abordar la prevención desde todos los flancos.
“En este recorrido específico los equipos municipales pudieron socializar con la comunidad del campamento Los Espinos que, según la información entregada por los dirigentes, está compuesto por unas 100 familias, muchas de las cuales han instalado sus viviendas en laderas de cerros. Las características del asentamiento, tal como ocurre con la mayoría de los campamentos, lo hace especialmente vulnerable ante la ocurrencia de incendios forestales, ya que hablamos de un sector con mucha vegetación seca que rodea las casas. Como Municipio estamos realizando un trabajo preventivo que apunta principalmente a socializar medidas de prevención, pero también buscamos escuchar a la comunidad para elaborar juntos estrategias de prevención de acuerdo a su situación particular.”
Carolina Vera, vecina de la villa, reconoció que la preocupación aumentó tras el incendio que consumió cerca de 400 viviendas en Viña del Mar y que afectó un sector de campamentos.
“Súper asustados, tratando de limpiar siempre, despejar los entornos, mojando. Gracias a Dios, nosotros como comunidad hemos tenido la prevención de dejar puntos claves de llave para poder en caso de cualquier cosa, tener un poquito de agua, ojalá nunca llegue a pasar una cosa así, pero igual dentro de todo, la mayoría de los vecinos tenemos una llavecita afuera y manejamos todo eso. Me parece genial que haya un programa informativo y que incluya a la comunidad en general. Me parece súper bien.”
Estas marchas preventivas se mantendrán durante la temporada estival, tal como otras medidas impulsadas por el Municipio Abierto que incluyen capacitaciones, jornadas de deshierbe comunitarias y reuniones periódicas con vecinos y vecinas.