La comediante Belén Mora tuvo un mal desempeño en la Quinta Vergara, donde terminó su rutina entre pifias. El dato es que ya le había pasado lo mismo poco tiempo antes en un escenario en Limache.
«Se las regalaron las Gaviotas»; «Nadie las pidió», «Martín Cárcamo se la regaló», «están regalando las gaviotas»; «al principio bien después se alargó mucho», «no merecida», «De humor poco», fueron algunas de las impresiones de asistentes al evento.
Después de recibir la Gaviota de Plata en un público dividido, la humorista asistió a conferencia de prensa, donde dijo «Bajándome del escenario no hice ninguna reflexión, me bajé todavía con la adrenalina, celebré con mi equipo, las reflexiones vendrán más adelante, para mí es tremendamente importante, cumplí un sueño».
Consultada sobre las pifias que había recibido en Limache con la misma criticada rutina que hizo en la Quinta Vergara, «En Limache me pifió un grupo de 30 personas y luego de esas pifias la gente me aplaudió a rabiar, fue una excelente jornada, excelente noche, sería tremendamente irresponsable cambiar a una semana del festival la rutina, una tiene que estar segura y confiado de su trabajo, yo confío y hasta este momento estoy orgullosa de lo que hice».