Durante la madrugada del sábado 25 de febrero comenzaron los movimientos para desplegar al personal militar que realizará tareas de resguardo de las áreas fronterizas delimitadas, según dispone el Decreto Supremo N° 78. Este despliegue fue realizado en fases y consistió en duplicar la fuerza que ya estaba apostada en el lugar desde el año 2017.
Con esta promulgación, el Ejército tiene la facultad para realizar tareas de resguardo en las áreas fronterizas, como control de identidad, registro y retención de personas que se encuentren dentro de estas zonas, para, posteriormente, ponerlas a disposición de las policías. Además, pone sus medios de transporte y tecnológicos a disposición del control fronterizo.
Al respecto, el Jefe de Fuerza de la Zona Fronteriza Tarapacá, General de Brigada Ramón Oyarzún, señaló: “Acá no vamos a actuar solos, va a estar la Policía de Investigaciones, Carabineros de Chile, organismos que realizan controles del complejo fronterizo, por lo que trabajaremos en conjunto para bajar los ingresos por lugares no autorizados.”
Cabe señalar que para realizar estas funciones el personal de Ejército, con apoyo de Carabineros de Chile, ha sido instruido sobre materias inherentes a la función policial, procedimientos de control y registro sobre personas y vehículos (en caso de que existan indicios de que la persona hubiera cometido algún delito), Derechos Humanos y grupos sujetos a vulnerabilidades, como mujeres, niños, migrantes, con capacidades diferentes y personas pertenecientes a pueblos indígenas y tribales o comunidad LGTBIQ.