Por José Ossandón
Esta tarde se dio a conocer a través de algunos medios capitalinos que el empresario Manuel Cruzat sumó un nuevo revés jurídico en sus intentos por revertir la quiebra (por deudas por $ 70.230 millones) y remate de Curauma, su proyecto inmobiliario a las afueras de Valparaíso; esto luego de que el Tribunal Constitucional (TC) rechazara un recurso, presentado por el mismo, de inaplicabilidad por inconstitucionalidad.
Dicho organismo aclara que el requerimiento carece de legitimidad pasiva y que no se advierte un conflicto constitucional, por lo que, como regla, la impugnación de una resolución judicial corresponde a los jueces de fondo y no al TC.
Cabe notar que desde que, a fines de 2013, la justicia decretó la quiebra de Curauma S.A., el proyecto emblema del grupo controlado por Manuel Cruzat Infante —uno de los principales empresarios de la década de los 80—, sus representantes legales han presentado cerca de 80 acciones, entre juicios e incidentes, destinados a recuperar los terrenos del proyecto que hoy están en manos de EuroAmerica.
Se trata de 2.015 hectáreas en el Fundo Las Cenizas y 111,15 hectáreas en el sector La Luz, en las comunas de Valparaíso y Viña del Mar, por las que Cruzat ha acusado al síndico a cargo del proceso de quiebra, César Millán Nicolet, de irregularidades; y a la jueza que llevó el proceso, de prevaricación.
Además ha entregado documentos a Fiscalía y Contraloría y acusó a todos los actores involucrados en el proyecto Curauma de participar “en un esquema para perjudicarlo”.